La noche del martes 26 de noviembre el caudal del río Tomebamba comenzó a aumentar, y el agua volvió a fluir por su lecho, que antes solo mostraba piedras secas. Las imágenes fueron difundidas por la Empresa Pública Municipal de Telecomunicaciones, Agua Potable, Saneamiento y Gestión Ambiental de Cuenca (Etapa), que también informó que los cuatro ríos principales de la ciudad han mejorado su caudal, aunque el Tomebamba aún se encuentra en un estado de estiaje.
Estos ríos confluyen en Cuenca y reciben aguas de los ríos Burgay, Jadán, Gualaceo, Cutilcay y otros afluentes menores. Además, reciben agua de drenes ubicados en seis subcuencas importantes: los ríos Collay, Pindilig, Mazar, Llavircay, Juval y Púlpito, entre otros, hasta llegar a Mazar.Por otro lado, la central hidroeléctrica de Mazar comenzó a operar de manera esporádica desde las 17:00 del lunes 24 de noviembre, después de varios días detenida para permitir la recuperación de su embalse.
La cota del embalse alcanzó los 2.111,85 metros sobre el nivel del mar, y para la mañana del miércoles 27 de noviembre había descendido a 2.111,09 metros, según los reportes de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec).