Una mujer de nacionalidad ecuatoriana, identificada como Erika, fue detenida por la Guardia Civil española como principal sospechosa del asesinato y desmembramiento de su bebé recién nacida, cuyo cuerpo fue hallado en diciembre de 2024 en el vertedero de Loeches, Comunidad de Madrid.
Los restos humanos estaban envueltos en bolsas y mezclados con desechos del basurero. Las investigaciones forenses confirmaron que la niña nació con vida, fue asfixiada y posteriormente descuartizada. Desde entonces, las autoridades realizaron un seguimiento exhaustivo que culminó con la captura de la madre este 1 de julio.
El caso ha conmocionado a España y se espera que Erika enfrente cargos por homicidio agravado y violencia extrema contra menores, mientras continúa la investigación judicial.
Erika, una mujer ecuatoriana de 39 años, fue detenida en Madrid este 1 de julio de 2025 por la Guardia Civil, tras ser identificada como la presunta autora del asesinato y desmembramiento de su bebé de cinco días de nacida. El cuerpo de la menor fue hallado en diciembre de 2024 en el vertedero de Loeches, entre residuos y dentro de bolsas plásticas, lo que desencadenó una larga y compleja investigación forense.
La detención se produjo luego de un exhaustivo cruce de datos genéticos y análisis forenses que vincularon directamente a Erika con los restos hallados. Según medios españoles, la acusación se enmarca en un posible homicidio agravado con alevosía, delito que podría ser sancionado con prisión permanente revisable, de acuerdo con el artículo 140.1 del Código Penal español, una figura introducida en 2015 para castigar casos especialmente graves, como el asesinato de menores de 16 años.
Además, ha salido a la luz un antecedente preocupante: en 2004, cuando Erika tenía 17 años, también dio a luz a un bebé que murió días después del parto. Aunque en su momento el caso fue archivado, las autoridades han anunciado que será reabierto, ante la sospecha de que también pudo haber sido asesinado.