Una segunda intervención policial reveló los secretos ocultos en la mansión donde fue capturado José Adolfo Macías Villamar, alias Fito, en Montecristi, provincia de Manabí. El operativo, bautizado como «Subterráneo», comenzó a las 06:00 del miércoles y dejó al descubierto una red de búnkers y caletas enterradas a más de tres metros de profundidad.
La propiedad pertenece a Christian Mendoza, funcionario de la Agencia de Tránsito de Manta, quien fue detenido en el primer operativo. El lugar, que también funcionaba como centro de operaciones, abarca unos 500 metros cuadrados, incluido un amplio patio, donde retroexcavadoras y tractores removieron la tierra.
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Bajo la lavandería, las autoridades hallaron dos búnkers en forma de L. El primero, de cinco metros, fue el escondite principal de Fito antes de su captura. Detrás de una pared falsa, se descubrió otro compartimento de cuatro metros, donde se almacenaba parte de su arsenal.
En total, la policía encontró:
- 19 armas de fuego entre fusiles y pistolas de alto calibre
- 60 alimentadoras
- Más de 2.000 municiones
- 95 joyas de lujo, valoradas en más de USD 500.000
- 19 relojes de alta gama
- USD 7.607 en efectivo, incluyendo monedas de distintas denominaciones
Además, fueron identificadas dos caletas más y una caja fuerte, todo distribuido estratégicamente bajo tierra. El único acceso al búnker era la lavandería de la casa, ubicada junto a un camino secundario, ideal para fugas rápidas.
La operación fue liderada por la Unidad de Investigación Antidrogas, en coordinación con el Bloque de Seguridad. Los trabajos con maquinaria pesada siguen en marcha, ya que no se descarta la existencia de más compartimentos.
Todo lo encontrado será clave en el proceso de extradición de Fito a los Estados Unidos.
