Un golpe contundente contra el contrabando tecnológico se registró en el Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre, en Tababela. El Servicio Nacional de Aduanas del Ecuador (Senae) decomisó más de 1.200 teléfonos iPhone, ocultos bajo una ingeniosa fachada: estaban declarados como supuestos generadores eléctricos.

El hallazgo
La alerta surgió en los controles aduaneros de carga Courier, cuando una encomienda proveniente de Estados Unidos levantó sospechas. Gracias al uso de equipos de Rayos X, se detectaron irregularidades en su interior. Ante las inconsistencias, se ordenó un aforo físico inmediato y fue allí cuando los agentes descubrieron el millonario cargamento de smartphones de alta gama.
El valor de la carga
El decomiso no solo llamó la atención por la cantidad de dispositivos, sino también por su valor comercial, que supera el millón de dólares. La magnitud del hallazgo podría configurar un delito aduanero, de acuerdo con la normativa vigente.
Investigación en curso
La mercancía incautada fue puesta bajo custodia y ahora se encuentra en proceso de peritaje técnico y legal. El objetivo es determinar las responsabilidades detrás de esta operación que intentó vulnerar los controles de ingreso al país.
Este decomiso refleja la capacidad de las autoridades para enfrentar el contrabando de tecnología, un delito que no solo afecta a la economía formal, sino que también pone en riesgo la seguridad del comercio en el Ecuador.