La mañana de este martes 18 de noviembre de 2025, una falla a gran escala en la red de Cloudflare provocó interrupciones en miles de sitios web alrededor del mundo, afectando incluso a plataformas de alto tráfico como X, ChatGPT y el portal del Aeropuerto de Quito. En Ecuador, los problemas comenzaron a sentirse desde las 08:00, cuando los usuarios reportaron lentitud, errores de conexión y páginas totalmente inaccesibles.
Cloudflare, una de las compañías más importantes de infraestructura digital a nivel global —proveedora de DNS, CDN y sistemas de seguridad— reconoció que su red presentó un fallo interno que desencadenó la caída masiva. Según la empresa, a las 11:20 UTC se detectó un pico de tráfico inusual dirigido hacia uno de sus servicios, lo que generó errores en cascada y afectó la estabilidad de la red.

El incidente provocó la aparición de los temidos «errores 500», fallos del servidor que impiden que las páginas carguen correctamente. Lo más grave es que el problema alcanzó incluso los paneles de control de Cloudflare, bloqueando temporalmente el acceso de los administradores a sus propias herramientas.
Hasta el momento, la empresa no ha podido determinar el origen del tráfico anómalo, aunque no descarta que pueda tratarse de un ataque coordinado o de un fallo interno no detectado previamente. “Estamos trabajando para que todo el tráfico se atienda sin errores”, indicó Cloudflare en su primer comunicado. Más tarde aseguró que “los servicios comienzan a recuperarse”, aunque advirtió que algunos clientes podrían seguir observando tasas de error superiores a lo normal mientras continúan los procesos de remediación.
La magnitud del evento ha encendido las alarmas a nivel internacional: uno de cada cinco sitios web del mundo utiliza Cloudflare, según datos citados por la BBC. Esto significa que millones de usuarios podrían haber enfrentado interrupciones, aunque aún no se conoce el alcance total del impacto.
Incluso Downdetector, la plataforma que registra fallos de servicios digitales, quedó inaccesible durante los primeros minutos del incidente, dejando claro que la caída afectó a pilares críticos de la infraestructura mundial.
El colapso ocurre menos de un mes después de una interrupción masiva en Amazon Web Services (AWS), que dejó fuera de servicio a más de 1.000 sitios y aplicaciones, evidenciando nuevamente la fragilidad de los sistemas que sostienen gran parte de la actividad digital.
Cloudflare continúa revisando logs, analizando el tráfico irregular y monitoreando la estabilidad de sus nodos globales para evitar una nueva interrupción.