Un explosivo detonó a las afueras de un local comercial, en la 12 etapa de la alborada en la Av. Francisco de Orellana al norte de Guayaquil.
El estallido del artefacto ocasionó daños en las paredes del inmueble y en una moto que estaba parqueada junto al establecimiento.
Según los moradores, el dueño de ese predio ya había recibido panfletos con amenazas por el pago de las vacunas.
Uniformados de la policía nacional acudió al sitio para indagar y confirmar si se trataría de extorsiones y revisar las grabaciones de las cámaras de video vigilancia del sector para poder dar con el movíl de este violento hecho.