Ecuador enfrenta una crisis de violencia sin precedentes. En los primeros seis meses de 2024, se registraron 92 matanzas y 3,037 homicidios intencionales, según datos del Ministerio del Interior. Las provincias costeras, principalmente Guayas y Manabí, son las más afectadas.
A pesar de estas cifras alarmantes, el Gobierno se contradice en sus informes sobre la violencia. El Ejecutivo afirmó que julio fue el mes menos violento del año, con una reducción del 27% en las muertes violentas. Sin embargo, la Secretaría de Comunicación de la Presidencia presentó un gráfico que muestra que julio fue el segundo mes con más homicidios, totalizando 580 asesinatos, solo 14 menos que junio.
La ministra del Interior, Mónica Palencia, reconoció que la violencia en Ecuador es cíclica, pero destacó una reducción del 17% en los asesinatos durante los primeros siete meses del año. Sin embargo, los ciudadanos siguen exigiendo medidas urgentes para frenar la crisis.
Siete provincias, incluida Guayas, están bajo estado de excepción, y desde enero, Ecuador se encuentra en estado de conflicto armado interno, una medida del presidente Daniel Noboa para combatir la inseguridad y el crimen organizado.
El Consejo de Administración Legislativa (CAL) aprobó un juicio político contra la ministra Palencia por la persistente inseguridad. La legisladora Paola Cabezas del movimiento Revolución Ciudadana, presentó la solicitud, también debido a la controversia del asalto a la embajada de México en Quito en abril. La Comisión de Fiscalización comenzará el proceso judicial contra Palencia esta semana.