El Ministerio del Interior ha revelado que el dron que sobrevoló la cárcel La Roca en Guayaquil este jueves 5 de septiembre llevaba explosivos. La amenaza era un atentado planeado contra esta prisión que alberga a reclusos políticos y criminales peligrosos.
En un comunicado oficial, la institución detalló que el Bloque de Seguridad frustró el ataque destinado a destruir el Centro de Privación de Libertad Guayas N. 3 (nombre oficial de La Roca), con el objetivo de neutralizar este centro.
Según la institución, militares, agentes del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) y personal del Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de Libertad (SNAI) impidieron el ataque con el dron explosivo.
El dron fue avistado antes de las 05:00 sobrevolando el complejo carcelario de Guayaquil, situado en la Vía a Daule.
Cerca de las 11:00, el artefacto estalló, causando daños significativos en el techo del reclusorio.
En septiembre del año pasado, un dron industrial cargado con explosivos logró posarse sobre el tejado de La Roca antes de ser interceptado por la policía y detonado de manera controlada. El estallido causó daños severos en el techo de la prisión, aunque milagrosamente no hubo heridos ni fallecidos.
Como resultado del incidente, varios reclusos fueron trasladados a la Cárcel Regional, situada cerca de La Roca.
Las prisiones del Puerto Principal han sido escenario de ataques con explosivos mediante drones, así como del ingreso de objetos prohibidos como armas a través de estos dispositivos voladores.
Ecuador enfrenta una escalada de violencia desde hace aproximadamente cuatro años, impulsada por bandas de delincuencia organizada que se disputan el control de las prisiones y han trasladado sus enfrentamientos a las calles.
Entre 2021 y 2023, más de 500 presos han sido asesinados en las cárceles ecuatorianas, la mayoría en una serie de masacres ocurridas durante enfrentamientos entre bandas rivales.