La mañana de este martes 28 de octubre, un derrame de diésel alertó a los habitantes del sector Pueblo Nuevo, en la parroquia La Unión, cantón Quinindé, provincia de Esmeraldas. El hecho fue confirmado por Petroecuador, que informó que la causa del incidente fue la rotura de una tubería conectada de forma ilegal.
Según la ministra de Energía, Inés Manzano, la ruptura se produjo por la presión excesiva en una manguera clandestina acoplada al sistema de transporte de combustible. “El derrame ya fue controlado y se activaron los protocolos de contingencia”, señaló en su cuenta de X cerca del mediodía.
Combustible llegó hasta un estero
El derrame afectó un estero que desemboca en el río Quinindé, generando preocupación entre las comunidades locales. La Empresa Municipal de Agua Potable (EMAPASOSQ-EP) informó que el combustible alcanzó una vertiente cercana al estero Pambula, donde se desplazó por cerca de 200 metros.
Ante el riesgo de contaminación, se activaron de inmediato los protocolos de protección del sistema de captación de agua en la parroquia Viche, con monitoreo permanente de la calidad del líquido y de la infraestructura afectada.
Respuesta y labores de limpieza
El Cuerpo de Bomberos de Quinindé y técnicos de Petroecuador se trasladaron hasta el sitio para contener la fuga y evitar la expansión del combustible hacia zonas más amplias. En el lugar trabajan más de 20 operarios de la empresa pública, que realizan tareas de remediación y limpieza del terreno afectado.

Riesgo ambiental bajo vigilancia
Autoridades ambientales y de energía mantienen un seguimiento constante a la zona para garantizar que no se produzcan afectaciones al suministro de agua ni daños mayores a los ecosistemas del área.
Este nuevo incidente reabre el debate sobre el impacto de las conexiones ilegales en los sistemas petroleros del país, un problema que no solo afecta la infraestructura nacional, sino que también pone en riesgo la salud pública y el medio ambiente.