Después de días de incertidumbre por el corte de agua en seis parroquias de Quito, la planta de tratamiento El Troje reactivó su operación tras recibir el caudal desde el sistema La Mica–Quito Sur. El anuncio lo realizó el alcalde Pabel Muñoz la madrugada de este miércoles 23 de julio de 2025, confirmando que las compuertas ya fueron abiertas y el líquido avanza hacia los hogares.
Los trabajos de emergencia incluyeron la instalación de una nueva tubería de 365 metros. El agua, aún en estado crudo, recorre 47 kilómetros hasta llegar a El Troje, donde inicia un proceso técnico que toma unas cuatro horas para potabilizarse.
Una vez lista, el agua se distribuye en 21 tanques desde donde se redirige hacia las viviendas, proceso que puede tardar entre 2 y 48 horas, dependiendo de la presión y distancia de cada sector.
Equipos técnicos y materiales de soporte han sido desplegados a lo largo de todo el sistema para garantizar el flujo sin interrupciones. El Municipio pidió a los quiteños hacer un uso responsable del agua, especialmente en las primeras horas del restablecimiento.
¿Cómo se transforma el agua en potable?
El tratamiento incluye varias etapas clave:
- Coagulación, con sulfato de aluminio para capturar partículas;
- Floculación, que agrupa impurezas;
- Sedimentación, donde estas se depositan;
- Filtración, para eliminar restos más finos;
- Y desinfección, que elimina microorganismos.
Con estos pasos, se garantiza que el agua que llegue a las casas sea segura y apta para el consumo humano.