El cerro Colorado vivió horas críticas tras un incendio forestal que se desató la tarde del jueves 25 de septiembre en el sector de Colinas del Maestro, al norte de Guayaquil. Aunque el Cuerpo de Bomberos logró controlar las llamas después de cinco intensas horas de trabajo, este viernes 26 de septiembre todavía se reportan focos secundarios activos que son vigilados para evitar que el fuego resurja.
200 bomberos y maquinaria pesada contra el fuego
Más de 200 efectivos del Cuerpo de Bomberos, apoyados por 50 unidades logísticas entre motobombas, tanqueros y vehículos de abastecimiento, trabajaron sin descanso hasta controlar la emergencia.
El fuego consumió alrededor de 12 hectáreas de vegetación del cerro, lo que encendió las alarmas ambientales y movilizó a varias entidades. Segura EP dispuso la presencia de 25 recursos adicionales, incluyendo maquinaria pesada de Obras Públicas, Urvaseo, la Prefectura del Guayas y empresas privadas, para construir líneas de defensa y facilitar el ingreso de brigadas forestales.
Evaluación de daños ambientales
La empresa Interagua suministró agua a las unidades desplegadas, mientras que direcciones municipales como Ambiente y Protección Animal y la división de Riesgos de Segura EP realizaron inspecciones para determinar los impactos en el ecosistema y las posibles afectaciones a la fauna local.

El fuego bajo vigilancia
Aunque el incendio fue controlado, las autoridades confirmaron que las inspecciones continúan este viernes para liquidar los focos secundarios y garantizar que las llamas no se reactiven.
El siniestro se suma a la lista de emergencias forestales que encienden las alarmas en Guayaquil, donde la sequía y las altas temperaturas han elevado el riesgo de incendios en las últimas semanas.