La madrugada de este miércoles 24 de septiembre, el presidente Daniel Noboa sorprendió con dos movimientos estratégicos en medio del paro nacional convocado por la Conaie: la llegada a Otavalo, epicentro de las protestas, y el nombramiento de una nueva Gobernadora de Imbabura.
Mediante el Decreto Ejecutivo 154, Noboa dio por terminadas las funciones de Luis Amaguaña Muenala, quien presentó su renuncia apenas cuatro días después de asumir el cargo, y designó en su lugar a Elsy Maite Landeta Sánchez. La decisión se produce en un contexto de fuerte tensión en la provincia, donde la violencia y los bloqueos se han intensificado.
Amaguaña, en un mensaje difundido en redes sociales, explicó que su dimisión respondía principalmente a la seguridad de su familia. El exfuncionario también se desmarcó del “vandalismo y politiquería” que, según él, han marcado las movilizaciones recientes.
Horas después de oficializar el relevo, Noboa se trasladó a Otavalo acompañado por el ministro del Interior, John Reimberg, y el ministro de Defensa, Gian Carlo Loffredo. El Ejecutivo busca marcar presencia en una ciudad que ha sido uno de los puntos más conflictivos del paro. La localidad amaneció militarizada para contener nuevos incidentes, tras jornadas de enfrentamientos que dejaron decenas de detenidos y cuantiosos daños.
La llegada del mandatario y el cambio en la Gobernación son interpretados como un mensaje claro de que el Gobierno no cederá ante la presión en las calles. Noboa intenta consolidar el control en una provincia clave, mientras reafirma que su administración mantendrá la línea de orden y firmeza frente a las protestas.
