El reciente hallazgo de cráneos y restos humanos en la residencia de Miguel Cortés Miranda, acusado del asesinato de su vecina María José en Iztacalco, ha provocado una nueva ola de horror y consternación en la comunidad.
Las autoridades han revelado que podrían existir vínculos entre Cortés y casi 20 delitos de homicidio, después de encontrar evidencia que señala a una larga lista de presuntas víctimas.
El impacto del asesinato de María José a manos de su vecino Miguel Cortés Miranda en Iztacalco, Ciudad de México, sigue creciendo con el descubrimiento de una escalofriante colección de pruebas en la residencia del presunto feminicida.
Cortés, un químico farmacobiólogo de 40 años, ha sido objeto de repudio público desde que se reveló su implicación en el crimen que conmocionó a la localidad.
La investigación policial tomó un giro aún más perturbador cuando las autoridades encontraron cráneos y restos humanos, junto con identificaciones de mujeres y otros objetos relacionados con posibles asesinatos, durante un registro en el departamento de Cortés.
Se ha informado que la Fiscalía ha iniciado una exhaustiva investigación en su contra, utilizando las pruebas recopiladas para establecer vínculos con una serie de desapariciones y homicidios ocurridos en los últimos años.
Un diario encontrado en posesión de Cortés ha agregado otro nivel de horror a la situación, ya que revela una metodología presuntamente premeditada para cometer sus crímenes, incluyendo datos sobre posibles víctimas.
La Fiscalía está analizando minuciosamente esta información para determinar su relación con la lista de personas desaparecidas en la región en los últimos años, lo que sugiere una posible cadena de delitos aún más atroz de lo que se pensaba inicialmente.
