La ciudad de Manta, en la provincia de Manabí, Ecuador, fue escenario de un ataque armado en una iglesia que resultó en la muerte de dos personas, un adulto y un niño de 11 años. El principal objetivo del ataque era Pedro Vicente Zambrano Hidalgo, conocido como ‘Junior’, de 34 años, quien perdió a su hija la semana anterior y estaba presente en la iglesia para una misa en su memoria.
Los atacantes, llegando en motocicletas y armados con fusiles, dispararon al menos 20 tiros contra ‘Junior’, asesinándolo durante la ceremonia religiosa. Trágicamente, Alexis, un niño de 11 años que estaba presente como parte de la congregación, resultó ser una víctima colateral del ataque.
El niño, originario de la parroquia Colón en Portoviejo, había viajado a Manta para visitar a su padre. La violencia del ataque ha causado conmoción e indignación en la comunidad. Hasta la fecha del 28 de diciembre de 2023, el distrito de Manta ha experimentado 314 muertes violentas, y la provincia de Manabí ha registrado un total de 933 asesinatos.
La alcaldesa de Manta, Marciana Valdivieso, ha solicitado la militarización del país ante la creciente ola de violencia que afecta a la ciudad. Las autoridades locales y nacionales se enfrentan a la difícil tarea de abordar la inseguridad y garantizar la seguridad de los ciudadanos en medio de este preocupante aumento de la violencia.