El país amaneció con una noticia que estremeció al mundo artístico: Paulina Tamayo, la inconfundible voz que acompañó a millones de ecuatorianos durante décadas, falleció a los 60 años. La noticia fue confirmada este martes 21 de octubre a través de sus cuentas oficiales, donde se rindió homenaje a la mujer que fue sinónimo de talento, pasión y orgullo nacional.
“La Grande del Ecuador, una leyenda de nuestra música, nos deja un legado que vivirá por siempre. Su voz queda en el corazón de todo un país. Gracias por tanto, eterna Paulina, por siempre La Grande del Ecuador”, se lee en el emotivo mensaje compartido en redes.
Hasta el momento, no se ha revelado la causa de su fallecimiento. Sin embargo, su partida llega pocos días después de haber participado en una entrevista televisiva y un evento artístico en Quito, donde se la vio sonriente y llena de energía, como siempre.
Nacida en Quito el 14 de abril de 1965, Tamayo mostró su don desde muy pequeña. A los cinco años ya ganaba su primer festival musical, y con el tiempo su voz la llevó a escenarios internacionales donde compartió cartel con gigantes como Juan Gabriel, Rocío Dúrcal, Roberto Carlos, Alci Acosta y José Luis Rodríguez ‘El Puma’.
Su repertorio incluye temas que forman parte del alma del Ecuador: “Collar de lágrimas”, “Amor, dolor”, “Ya no te quiero, pero…” y “Parece mentira”, entre muchos otros que hoy suenan como despedida en radios y hogares.
A lo largo de su carrera, recibió innumerables reconocimientos, entre ellos:
- Festival Colombo Ecuatoriano (1970) – Primer lugar con apenas cinco años.
- Festival Latinoamericano de Juventudes (1977) – Artista Internacional en Venezuela.
- Artista Taquillera del Año (2010) – Asociación de Empresarios y Productores Musicales del Ecuador.
- Galardón Estrella Latina (2015) – Prensa Española, Madrid.
- Ecuadorian Music Award (2018) – Nueva York.
- Premio Trayectoria del Año (2020) – Premios Armony Music.
Paulina Tamayo fue más que una cantante: fue una embajadora del sentimiento ecuatoriano, una artista que supo unir generaciones con su voz inconfundible. Su partida deja un vacío inmenso, pero su música seguirá siendo la melodía eterna de un país que hoy llora su silencio.