Un video de apenas segundos ha desatado una tormenta en la industria musical: Shakira y el joven cantante barranquillero Beéle, recientemente envuelto en controversias, aparecieron juntos en un estudio de grabación bailando la mítica cumbia Currucuchú de La Niña Emilia, símbolo del Carnaval de Barranquilla.
La escena, compartida en redes por el propio Beéle, muestra a la superestrella colombiana en un ambiente de complicidad y risas, lo que bastó para que millones de fanáticos lo interpretaran como la antesala de una colaboración histórica que une a dos generaciones de artistas caribeños.
Furia viral y orgullo caribeño
En cuestión de horas, el clip acumuló millones de reproducciones y desató una avalancha de comentarios. Entre ellos, frases de orgullo como “De Barranquilla para el mundo” o “Se viene temazo”. Para muchos, esta unión es un homenaje directo a las raíces culturales de ambos intérpretes.
La jugada maestra de Shakira
Tras meses de titulares sobre su vida personal, la intérprete de Las Mujeres ya no Lloran World Tour parece redoblar su apuesta en la música con un movimiento estratégico que podría convertirse en un nuevo fenómeno global. Con estadios llenos y millones de boletos vendidos, este acercamiento con Beéle refuerza su imagen de artista que nunca pierde la conexión con sus raíces.
El lado polémico: críticas y dudas
Pero no todo ha sido euforia. El pasado reciente de Beéle, marcado por un escándalo con Isabella Ladera y la filtración de un video íntimo, ha generado cuestionamientos. En redes sociales, algunos usuarios criticaron la decisión de Shakira:
“Shakira, ¿tú que odias a los infieles, qué pasó?”
“Nooo Shakira noooo”
Las reacciones dividen al público: mientras unos celebran la unión, otros consideran riesgoso que Shakira se asocie con un artista rodeado de controversia.
¿Éxito asegurado o apuesta arriesgada?
Aunque ninguno de los artistas ha confirmado oficialmente una colaboración, la posibilidad de un tema conjunto ya acapara titulares en medios internacionales. La incógnita ahora es si esta alianza será recordada como un golpe musical histórico o como un movimiento polémico en la carrera de Shakira.
