🔴Colombia bajo fuego: 19 atentados con explosivos y drones sacuden al país

Colombia enfrenta una ola de violencia sin precedentes recientes con 19 atentados coordinados en el suroeste del país. Los ataques, atribuidos a disidencias de las FARC, incluyeron el uso de coches bomba, drones explosivos y armas de fuego, dejando al menos siete muertos y más de 36 heridos. Las acciones violentas se produjeron tras el atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay y reflejan un salto tecnológico en las tácticas de los grupos armados, lo que intensifica la crisis de seguridad en Colombia.

Una ola de violencia coordinada sacudió el suroeste de Colombia este 10 de junio de 2025, con 19 ataques simultáneos que incluyeron coches bomba, drones explosivos y ráfagas de disparos. Los atentados, atribuidos a disidentes de las FARC, causaron la muerte de al menos siete personas —entre ellas dos policías y varios civiles— y dejaron más de 36 heridos. Las acciones violentas se extendieron por varios municipios como Cali, Jamundí, Corinto, Buenaventura, Caloto y Villa Rica, generando caos, miedo y tensión.

Según las autoridades, estos actos habrían sido una respuesta violenta a recientes operaciones militares del gobierno en zonas estratégicas controladas por grupos armados. También se señaló que estas agresiones forman parte de una ofensiva coordinada de alto impacto, planeada para desestabilizar regiones claves y enviar un mensaje de fuerza.

En Cali, tercera ciudad más grande del país, se reportaron explosiones cerca de estaciones de policía, especialmente en barrios del sur. Uno de los uniformados fallecidos se encontraba en esa zona. En otros municipios como Jamundí y Corinto, las detonaciones dejaron daños materiales severos, obligando al cierre de comercios, suspensión de clases y movilización de equipos de emergencia.

Una particularidad que preocupa a los organismos de seguridad es el uso de drones con explosivos, una táctica reciente que refleja un salto tecnológico en las capacidades de estas agrupaciones ilegales. Esta modalidad representa un riesgo inédito para la población y las instituciones, ya que permite ataques precisos desde el aire sin exponer directamente a los responsables.

El número de ataques, su distribución geográfica y su intensidad no solo elevan las alertas de seguridad, sino que también alimentan el debate sobre la viabilidad de los diálogos de paz con estos grupos armados, muchos de los cuales no han mostrado voluntad real de desmovilización.

Estos atentados se produjeron apenas días después del atentado contra el senador Miguel Uribe Turbay, quien fue baleado en Bogotá. Actualmente se encuentra hospitalizado en estado crítico pero estable, lo que ha incrementado aún más la preocupación en todo el país.

Ante la violencia, el alcalde de Cali declaró que «no se permitirá un regreso a los años oscuros del terrorismo», en referencia a la época en que los carteles de droga y los grupos armados protagonizaban baños de sangre en las ciudades.

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