El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró que Israel no se detendrá hasta cumplir todos los objetivos de su ofensiva contra Gaza, incluyendo la recuperación de los cuerpos de los rehenes aún retenidos en el enclave palestino.
Durante una ceremonia en el Monte Herzl de Jerusalén, en homenaje a los soldados israelíes caídos, Netanyahu afirmó que “quien levante la mano contra nosotros pagará un alto precio”. Además, enfatizó que su gobierno está decidido a traer de vuelta a cada ciudadano, vivo o muerto, que aún se encuentra en territorio gazatí.
El mandatario también agradeció el apoyo logístico de Estados Unidos en las labores de búsqueda, un respaldo que, según analistas, consolida la cooperación militar entre ambos países en medio de la prolongada guerra con Hamás.
Advertencias desde la Autoridad Palestina
Mientras tanto, la Autoridad Nacional Palestina (ANP) expresó su preocupación por la posible ruptura del acuerdo de paz alcanzado recientemente.
El enviado especial Mohamed Shtaye declaró desde Ginebra que Netanyahu podría romper el pacto si considera que esto fortalece su coalición de gobierno. No obstante, confió en que los garantes internacionales —entre ellos Turquía, Egipto y Estados Unidos— actúen para garantizar su cumplimiento.
“El acuerdo debe cumplirse. Ya no se trata solo de confianza entre Israel y Palestina, sino de la palabra de las potencias que lo respaldaron”, subrayó Shtaye.
Riesgo de nuevas tensiones
El funcionario palestino advirtió que Israel aún mantiene el control del 53% del territorio de Gaza y podría intentar anexionarse una zona de seguridad de alrededor de 80 kilómetros cuadrados, reduciendo aún más el territorio palestino efectivo.
“Gaza ha perdido más de un tercio de su territorio desde 1949. Si Israel mantiene esa zona, los palestinos perderán aún más su tierra y su futuro”
, afirmó Shtaye.
Además, cuestionó el plan propuesto por el presidente estadounidense Donald Trump, respaldado por países árabes, calificándolo de “declaración de principios sin soluciones reales”, ya que —dijo— no aborda el fin de la ocupación ni la reconstrucción de Gaza.
Un conflicto sin cierre
Shtaye insistió en que la reconstrucción y la justicia deben estar en el centro del proceso de paz.
“Todos hablan de los cuerpos israelíes, pero nadie habla de los cuerpos palestinos. Este doble rasero debe terminar”, expresó.
Recordó que Israel ha liberado casi 2.000 prisioneros palestinos, pero mantiene a más de 9.200 detenidos, incluidos médicos y funcionarios sanitarios gazatíes.
“Estas medidas ganan tiempo, pero no traen la paz. Se necesita un salto real, una solución definitiva”, concluyó.
