El Poder Judicial anuló el juicio contra Keiko Fujimori, lideresa de Fuerza Popular, acusada de lavado de activos y liderar una organización criminal en la campaña de 2016. La decisión, tomada por unanimidad por el Tercer Juzgado Colegiado de la Corte Superior Nacional, no implica su inocencia. También se dejó sin efecto el proceso contra José Chlimper, exsecretario general del partido, acusado de los mismos delitos y de obstrucción a la justicia.
Según el tribunal, todo lo avanzado en el juicio será revisado desde la etapa de investigación preparatoria. La medida responde a un fallo previo del Tribunal Constitucional que ordenaba anular el juicio oral en curso, ratificando así los argumentos presentados por la defensa de Chlimper.
Decisión judicial impacta el proceso contra Keiko Fujimori y otros acusados
La reciente anulación del juicio oral contra José Chlimper impacta directamente el proceso judicial de Keiko Fujimori y decenas de coacusados en el Caso Cócteles, vinculado al escándalo de Odebrecht. A las 11:25 a.m., los jueces Mercedes Caballero y Max Vengoa declararon nulo lo avanzado, representando un significativo retroceso en el caso.
La fiscalía anunció que solicitará una reconsideración para continuar el juicio por falsedad genérica y falsa declaración contra Chlimper. Este, como exsecretario general de Fuerza Popular, es clave en las investigaciones por su presunto rol en la gestión de fondos y posible encubrimiento de financiamiento irregular.
El Caso Cócteles, emblemático en las indagaciones de corrupción en Perú, cuestiona la transparencia en el financiamiento político y vincula a figuras clave como Fujimori con la red de corrupción de Odebrecht, sumando relevancia internacional al escándalo.
¿Qué es el caso Cocteles?
El Caso Cócteles investiga el presunto lavado de activos vinculado a las campañas presidenciales de Keiko Fujimori en 2011 y 2016. Se analizan los aportes recibidos por Fuerza Popular, en particular los montos reportados en eventos como cocteles benéficos, que habrían sido usados para justificar dinero de origen ilícito.
Keiko Fujimori, como líder del partido, es señalada como la cabeza de una supuesta red de financiamiento ilegal, que habría recibido aportes ilegales, incluyendo fondos de Odebrecht.
Además, dirigentes y colaboradores de Fuerza Popular están acusados de participar en la recolección de fondos y la simulación de donaciones para encubrir el origen real de los recursos.
