El ministro John Reimberg anunció el 27 de febrero que el objetivo no es militarizar el hospital, sino actuar estratégicamente para proteger a los servidores administrativos y médicos. Este grupo de inteligencia tendrá la tarea de:
✅ Acompañar al personal administrativo y brindar protección.
✅ Identificar y desmantelar posibles mafias internas.
✅ Revisar contratos actuales y futuros para evitar presiones indebidas.
✅ Investigar y frenar las amenazas a funcionarios para favorecer contrataciones.
«Sabemos que los empleados reciben amenazas para favorecer ciertos contratos. Tenemos idea de quién está detrás de esto», declaró Reimberg en una entrevista televisiva.
Intervención del Bloque de Seguridad
Desde el 26 de febrero, la crisis ha llevado a una intervención del Bloque de Seguridad, compuesto por policías y militares, quienes han inspeccionado zonas críticas del hospital, incluyendo:
🔹 Subterráneo: Donde hay túneles con pasadizos, una planta de aguas servidas y conexiones con farmacias y bodegas.
🔹 Farmacias y bodegas: Se investiga el manejo de medicamentos e insumos.
🔹 Exteriores del hospital: Se reforzará la vigilancia para seguridad de los visitantes.
Grave antecedente: el secuestro de Ronny Camba
El 31 de enero, el director administrativo del hospital, Ronny Camba, fue secuestrado tras asistir a un evento deportivo en La Atarazana, Guayaquil. Su desaparición ha encendido alarmas sobre los niveles de violencia y amenazas dentro del hospital.
Medidas de seguridad reforzadas
El comandante de la Zona 8, Pablo Dávila, informó que 40 agentes especializados del GIR y GEMA lideran la intervención. Destacó la falta de adecuación de la planta de aguas servidas como un problema estructural que también pone en riesgo al personal.
Con esta intervención, las autoridades buscan recuperar la seguridad del hospital y eliminar las presiones mafiosas que afectan la gestión administrativa y médica.