Durante la audiencia de juicio, la Fiscalía Especializada en Delincuencia Organizada, Transnacional e Internacional (Fedoti) presentó pruebas sólidas que sustentaron su teoría de que los tres imputados secuestraron al joven y lo mantuvieron cautivo durante tres días. La Fiscalía utilizó diversas técnicas de investigación, incluyendo interceptación de llamadas, triangulación de comunicaciones, y testimonios clave para identificar a los responsables del crimen.
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El secuestro ocurrió el 9 de julio de 2023 en el sector de La Ferroviaria, en el sur de Quito, cuando la víctima, tras una reunión con amigos, abordó un taxi a través de una aplicación móvil. Sin embargo, un vehículo negro sin placas lo interceptó y lo forzó a subir, llevándolo en contra de su voluntad.
Pese a los intentos de la víctima por regresar, los secuestradores lo trasladaron a un lugar aislado en Nanegalito, al noroccidente de Quito. A diferencia de otros secuestros, los delincuentes no exigieron dinero, sino un beneficio territorial en Esmeraldas, relacionado con actividades ilícitas vinculadas al padre de la víctima, presunto narcotraficante, afirmó la Fiscalía.
El caso fue atribuido a Fabricio Colón Pico, identificado como el líder de la Mafia CP, parte del grupo criminal Los Lobos. Tras tres días en cautiverio, los secuestradores dejaron a la víctima en un centro comercial del norte de Quito, entregándole $20 para su transporte.
En su defensa, los acusados rechazaron las acusaciones de la Fiscalía, pero la sentencia fue firme. Cada uno de los procesados deberá pagar una multa de 12 salarios básicos unificados, y el monto total de la reparación integral será de $3.000 dólares.
Cabe destacar que en octubre pasado, Fabricio Colón Pico también fue condenado a cinco años de prisión por intimidar a la fiscal general del Estado, Diana Salazar.