En una entrevista con Ecuavisa, el ex candidato a la presidencia admite que a pesar de tener un fuerte grupo de seguridad privada, el peligro que lo rodea tanto a él como a su familia es grande.
Además, mencionó que no quiere vivir con chalecos antibalas, ni cascos protectores para toda su vida.
“Yo siempre he sido un tipo que no ha tenido miedo pero entiendo que existen circunstancias especiales que dejan en evidencia que las cosas no son como antes. Las condiciones establecen que tengo que vivir con un chaleco (antibalas) y en las salidas abiertas con casco. Yo no espero eso para mi vida, tengo que efectivamente tomarme un tiempo para mí” mencionó.
Antes de partir, debe realizar algunos labores del partido político que aún lidera, mientras tanto seguirá protegiéndose cada vez que esté a un espacio público.