Después de que Rusia levantara el veto a las exportaciones de banano procedentes de Ecuador, una delegación rusa se prepara para visitar las plantaciones en el país sudamericano. El anuncio fue hecho por la canciller Gabriela Sommerfeld el 16 de febrero, luego de una reunión con el Ejecutivo en Guayaquil. Sommerfeld afirmó que la tensión entre los dos países se ha superado, lo que llevó a la suspensión temporal de cinco exportadoras de banano ecuatoriano debido a la presunta detección de la mosca jorobada en una carga de la fruta ecuatoriana. Además, el presidente Daniel Noboa se reunió con el Embajador de Rusia en Ecuador, Vladimir Sprinchan, en la Gobernación del Guayas, en Guayaquil.
Mientras tanto, la autoridad fitosanitaria de Rusia sostendrá una reunión virtual el 19 de febrero con sus homólogos de Agrocalidad en Ecuador. Sommerfeld enfatizó la importancia de abordar cada tema de las relaciones internacionales de manera separada y delicada, «sin mezclar temas ni especular sobre la información». Aseguró que el levantamiento del veto a las exportadoras no está condicionado por las diferencias diplomáticas sobre la entrega de equipos militares rusos a Estados Unidos.
En declaraciones a la prensa, el embajador Sprinchan aclaró que el problema del armamento ruso y el levantamiento de la sanción al banano son temas separados. Indicó que las preocupaciones del servicio fitosanitario ruso respecto a la mosca jorobada no son nuevas y datan de años atrás, sin que Agrocalidad haya dado una respuesta al respecto. Por lo tanto, se prevén reuniones y visitas técnicas a las plantaciones y las instalaciones de Agrocalidad en Ecuador.
Respecto al tema del armamento, el embajador expresó confianza en que el gobierno ecuatoriano no está decidido a enviar armamento a un conflicto, dada su condición de neutralidad. También destacó el papel de Ecuador como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU.
El diplomático mencionó la posibilidad de ampliar y enriquecer las relaciones bilaterales en áreas como la energía y el transporte, e incluso habló de la posibilidad de construir un ferrocarril de carga para conectar la Sierra y la Costa ecuatorianas.
